Sesión 13 - 25/05/24
La Inquisidora y La Consejera comienzan con una acalorada discusión en la que Eris parece estar tranquila y tener la situación controlada. La inquisidora intentarla atacar pero Eris es solo una ilusión. Tras eso comienza una batalla entre los Acólitos que quieren defender a Loran y La Inquisidora que quiere matarle por no poder herir directamente a La Consejera. El equipo de protagonistas se retira con Loran al interior de la catedral donde son atacados por Kurokawa. Esta deja a Loran herido (pero se logra estabilizar) y lucha contra Azadon y Kaesius. Cuando ve que no puede vencer, decide dejarles y rematar a Loran. Con la muerte de este por parte de las fuerzas de La Inquisidora, se rompe el decreto de La Jueza y acude El General a poner fin a la batalla, llevándose todos a la corte de la Jueza de nuevo.
Aquí se juzga a La Inquisidora por atacar a las propias fuerzas aliadas de La Suprema. La situación deja a La Jueza desconcertada dado que la acusación siempre había sido la propia Inquisidora. La Consejera toma entonces este papel y manipula las evidencias y faltas de pruebas. Mientras La Inquisidora acusa a La Consejera de traidora a La Suprema esta esquiva sus comentarios aprovechando de su actitud rabiosa para demostrar a todos los Heraldos presentes que La Inquisidora ha perdido la razón.
Durante el juicio, La Consejera se acerca a Loran y le vierte un bote de Vacío para revivirle, el mismo que le entregaron los protagonistas de la partida "The Holy Father". Además, comenta en alto una frase "Sorprendente que mal está el equilibro para que esto funcione." Nadie lo entiende en el momento ella se refiere a que el Vacío está tan en falta de un equiilibro que es capaz de revivir a Loran para crear ese mal necesario que falta. También, hace varias veces mención a "El Supremo" en lugar de "La Suprema", dado que se refiere en realidad al Vacío como su maestro y salvador, secreto que tampoco nadie conoce.
Finalmente los protagonistas dan su testimonio ante la Jueza y Azadon en concreto remarca a La Inquisidora sus malos métodos pese a la razón en sus acciones. Esta ha torturado y matado a Seraphina, ha causado indirectamente que Victoria se forzase a matarlos y así caer ella en combate y mantiene un régimen de terror entre sus tropas. Además, al no controlar la rabia está demostrando a todos los presentes que La Consejera tiene razón. Eris no está de acuerdo con esto y fuerza el testimonio de Loran, que ha vuelto a la vida gracias al Vacío. Cuando este intenta hablar, La Consejera tira de sus enlace con él y fuerza un haz de energía oscura hacia los cielos desde la marca del cuello de Loran (The Cruel Revenant).
En cuestión de segundos, Leo hace presencia en escena atraído por esta e intenta matar a Loran. Eris, secretamente, rompe el suelo de la corte haciendo que caigan desde los cielos a kilómetros de altura.