06 - Teocracia de Brevzen

Nuestros protagonistas llegan a Helenia y se encuentran a Gabriel hablando con los sabios en la aldea. Este les cuenta que viene buscando a Zadkiel, que sus fuentes le han dicho que estaba en Helenia. En cuanto ve a Olben le reconoce y le llama con el nombre de Zadkiel. Al principio Olben niega el nombre, pero tras la insistencia de Gabriel acaba por aceptarlo. Le pide que regrese con los cardenales ya que tras la caída de Gear no tiene razones para estar lejos. También habla con Valerian de una posible alianza debido a la situación actual de Loran y al gran ejercito que han reunido. Con esto les invita a ir a Brevzen. También saluda a Tellbost con educación pero sin decir nada más.

Al llegar a Brevzen, Olben insiste a Tellbost en acompañarles, pero este se niega. Selendis aprovecha la situación para ofrecer quedarse en la nave y defender sus posiciones. Todos dejan sus reliquias aquí y se adentran en la capital. Allí les llevan a la catedral donde se encuentran Michael, Raphiel y Samael.

Michael Templario	Gabriel Mensajero	Uriel Cosecha	Camael Guerra	Raphiel Salud	Jophiel/Samael Conocimiento	Zadkiel Misericordia
Espada	Napie	Anillo	Arco	Bastón	Corona	Grial

Cuando llegan todos están esperando a Olben para una charla del pontífice Abraham. Este les cuenta a todos que ha decidido unirse a Helenia y los demás en la batalla, además sospechan que Loran pueda tener un octavo artefacto. Al mencionar esto, piden colaboración a los protagonistas como enviados de todas las naciones que colaboren en esto y les cuentan la historia de los artefactos. Los que se niegan a contar esto son Samaely Michael.

Lo primero que les desvelan es que todos los Cardenales, beben del agua bendita consiguiendo vida eterna. Hace siglos, todos los miembros de la Iglesia, fueron encomendados por Abraham para buscar los artefactos del caos que llegaron al mundo.

Michael consiguió la Espada luchando contra los gigantes en un duelo, ganandose su respeto y la posibilidad de llevar la carga de esta.

Gabriel siguió al Napie de dueño en dueño, de taberna en taberna hasta alcanzarlo y ponerle fin a sus juegos sin sentido.

Uriel fue a la cueva de los dragones a por el Anillo, tentándoles con comidas y majares consiguio despistarlos y llevárselo.

Camael fue a la casa de Tamahagane, los grandes cazadores, para conseguir el Arco, pero este había sido robado por otra casa de Northon y acabó encontrandolo en Gear. Por desgracia para Camael, las defensas de la isla se volvieron contra él haciendo que cayese al mar, llegando a rozar la situación de guerra. Sin embargo Tellbost decidió entregarles el Arco y calmar así la situación.

Raphiel y Zadkiel, se cambiaron la búsqueda de artefactos, ella pasó a buscar el Bastón y él se propuso encontrar el Grial. Raphiel fue a hablar con los elfos, pidiéndoles comprensión y que entregasen el Bastón. Para conseguirlo les enseñó secretos de las artes de la vida eterna, consiguiendo así vivir más años que ningún mortal y entregar el bastón a la Iglesia.

Jophiel fue al antiguo reino que se conoce ahora como Helenia. Jugando una partida de ajedrez contra el dictador de la nación, consiguió ganarse la Corona, pero el tirano no dejó que se fuese así como así. Para poder escapar, Jophiel tuvo que usar el artefacto del caos, consumiendo este así su mente años más tarde y quedando Samael en su lugar.

Todos los objetos acabaron en manos de la Iglesia, pero lo que no sabían es que el Cáliz y Loran eran un solo ser, permitiéndole a este utilizar sus poderes y alimentarse aún encerrado. Con esto rompió el sello que se les puso y tentó a Samael para liberaros y entregárselos a Loran, el cual ahora era líder de un Imperio. Él aceptó a cambio de ser el sucesor de Loran, aunque lo que este no sabía es que Loran ya era inmortal al unir su alma con la de un demonio.

Samael les lleva a la sala de los artefactos y si le descubren, como enfado hacia Loran les entregará un colgante para encerrar y sellar a uno de estos demonios. Si no se lo da él se lo dará Abraham, pidiéndoles que traigan la paz a las islas.